Hoy día 02/04/2021 Ugaitz Etxeberria, su aita Eneko y quien subscribe (Pablo Momoitio) hemos pasado una mañana disfrutando del ajedrez esta vez de forma presencial, algo muy añorado en estos tiempos de pandemia.
Han sido casi tres horas en el club; por supuesto todo bien ventilado y con todas las medidas contra el COVID my muy presentes.
Después de algunos preparativos escénicos, (retrasmisión en directos a través de Lichess y de Meet), la partida empezaba alrededor de las 11:20 horas de la mañana.
Eneko, actuando de arbitro sortea las piezas y Pablo se llevaba las de color blancas, por lo tanto Pablo abría el reto con la jugada 1.- g3, a la que Ugaitz respondía inmediatamente cogiendo el centro con 1.- …, d5 …
Las primeras jugadas transcurrieron con normalidad en una Apertura Retí, Ataque Indio de Rey, pero Ugaitz cometió pronto algunas imprecisiones, que le hicieron quedar peor teniendo que entregar dos piezas por torre, ventaja que Pablo supo explotar hasta el final, imponiendo su pareja de alfiles contra torre.
Era la primera vez que Ugaitz jugaba ajedrez a este ritmo; incluso se emplearon algunos métodos “extras” para hacerle jugar lento algo a lo que indudablemente Ugaitz no esta aconstumbrado. Es indiscutible y palpable el avance a marchas forzadas del nivel que está adquiriendo Ugaitz, culpa indudable también a las clases de tecnificación que lleva recibiendo desde hace meses por el Maestro Internacional y gran amigo del club MI Jesús Iruzubieta.
Este club a apostado fuerte por este chaval de 11 años de la cantera de Ortuella, quien seguro en un futuro no muy lejano traerá grandes éxitos al Ortuellako Xake Kluba “El Peón”.
Habrá que repetir sesiones de entrenamiento y competiciones a medida en este mismo formato y compaginarlas con la tecnificación de Iruzubieta para que nuestro pupilo vaya asimilando y entiendo también el ajedrez lento (estándar).
El año que viene, a bien seguro, Ugaitz se federara ya, y será jugador indiscutible y líder en alguno de los equipos de este club en alguna de sus categorías.
Bravo Ugaitz ¡¡¡ bravo peón ¡¡¡